COVID y COCINA

COVID y COCINA

Durante la historia, han habido acontecimientos que marcan un antes y un después. Momentos que hacen que el día a día sea completamente diferente.

Ya hemos vivido muchos cambios significativos. Y sin duda, el COVID-19, ha marcado un punto de inflexión en la historia, que cambiará nuestra forma de vivir y comportamiento de cara al futuro.

Pero, si alguna cosa buena podíamos sacar de esta crisis, nosotros, hemos encontrado una. La cocina casera.

Eso es, el confinamiento mundial ha empujado a las personas a dedicarle más tiempo a la cocina. Ya sea como una vía de escape, como una afición olvidada, o como un nuevo universo por descubrir. Y nos encanta escuchar algo así.

Datos de estudios recogidos por organismos como "Influence Central" muestran que el 88% han estado cocinando más comidas en casa en mitad de la pandemia y el 49% ha empezado a preparar comidas desde 0.

Es cierto que el confinamiento se ha notado en los supermercados. La compra de bienes de primera necesidad aumentó en un 21% según la consultora Kantar y el gasto promedio en la compra un 25%. Pero hay otros detalles que nos dejan entrever este aumento de la dedicación a la cocina. La levadura y las harinas han sido unos de los productos que más rápido se han agotado.

Más de la mitad de los consumidores están probando nuevas recetas, casi todas de repostería, pues es de las elaboraciones que más enganchan.

Pero no solo eso. Muchas personas han cambiado sus hábitos alimenticios. El aumento de tiempo para poder cocinar y un incremento de la concienciación por la salud, ha provocado que la cocina “healthy” se vuelva más popular. Por ejemplo, el 39% de los encuestados afirma que ahora elabora desayunos mucho más saludables.

Nosotros promovemos el consumo de alimentos naturales, lo menos procesados posibles, cocinados con mimo y cariño. Por ello, que la gente haya retomado el hábito de cocinar, nos alegra. Y es posible que, cuanto todo vuelva a ser más "normal" muchas de esas personas vuelvan a "tirar mano" de comidas rápidas o pre-cocinadas. Pero por cada persona que decida dedicarle un poquito de tiempo más a la cocina, ya habremos ganado algo positivo.